Para hacer estas botitas de andar por casa necesitáis:
- Polar
- Tela para el exterior
- Tela antideslizante
- 2 cierres tipo mochila
- una hoja de goma eva
- 60 cm de elástico redondo
- 2 juegos de snaps
- hilo
- tijeras
- pinza para snaps
- máquina de coser
En primer lugar tenéis que sacar el patrón. Para ello utilizad unos zapatos de vuestr@ peque. Tenéis que medir el contorno de la suela y dividirlo entre dos (a mi me dio 36 : 2 = 18 cm). Esta será la medida de la base. A partir de la medida de la base, dibujáis el contorno de la bota cogiendo el zapato de referencia.
Estas son mis medidas para unas botas del número 20.
Estas son mis medidas para unas botas del número 20.
Una vez que tengáis el patrón, cortáis 4 piezas de forro polar y 4 de la tela que hayáis elegido para el exterior dejando un margen de 1 cm para las costuras.
Luego, tenéis que marcar el contorno de las 2 suelas sobre la hoja de goma eva y recortarlas.
A continuación, tenéis que cortar dos suelas más de tela antideslizante y dos más de polar dejando un margen de 1 cm para las costuras (cuidado con que sean diferentes, una para cada pie).
Una vez que tengáis todas las piezas cortadas, tenéis que unir las piezas de la tela del exterior de cada bota entre sí, derecho con derecho, cosiendo como se indica en el siguiente dibujo con trazo rojo.
Coséis de la misma manera las piezas de polar de cada bota.
Una vez cosidas las piezas de tela y polar de cada bota, las juntáis revés con revés, haciendo que las costuras queden alineadas y las sujetáis con un par de alfileres.
A continuación, montáis una especie de sandwich con las suelas, poniendo la goma eva entre la tela antideslizante y el polar y lo sujetáis con alfileres. Yo he cosido directamente la suela con el resto de la bota, pero si queréis, podéis coser las tres piezas de cada suela siguiendo el contorno de la de goma eva y luego coser la suela ya montada con el resto de la bota.
La suela se une con alfileres a las dos piezas de la bota. Tienen que estar en contacto la tela antideslizante de la suela con el derecho de la tela exterior de la bota. Como se observa en la imagen.
Luego, cortáis el elástico por la mitad y ponéis las botas del derecho. Lo pasáis entre la tela exterior y el polar, haciendo que los dos extremos queden en el talón. Lo sujetáis con unas puntadas en el empeine, a la altura del tobillo.
Pasáis los extremos del elástico por el cierre tipo mochila y hacéis un nudo.
Dobláis hacia dentro 1 cm el polar y la tela del exterior de la parte superior y trasera de la bota y lo sujetáis con alfileres. Lo coséis teniendo cuidado de no enganchar el elástico.
Cortáis 4 tiras de polar de 1,5 x 14 cm y las coséis de dos en dos. Las coséis haciendo un cuadrado de más o menos 1 cm de lado en el lateral interior de cada bota y en la parte que queda suelta les ponéis un snap.
Y para terminar, en la parte exterior de cada bota, ponéis un snap que coincida con el que hayáis puesta en las tiras de polar.
La verdad es que son bastante mejorables, pero son cómodas y muy calentitas.